El concejal socialista alerta de que la sentencia de Serra Gelada llevará asociada nuevas subidas de tasas e impuestos

El pasado viernes 2 de mayo, a la gran mayoría de los vecinos y negocios, que tienen domiciliado el pago la tasa de la basura, les llegó por segundo año el “estacazo” a sus bolsillos cuando se les cargó en cuenta el recibo con un incremento que oscila entre un 68 y un 92 por ciento respecto al 2023. El concejal socialista que fiscaliza en área de Hacienda, Antonio Charco, ha destacado que “el alcalde y su gobierno son los únicos responsables de este tasazo por su mala gestión” y ha alertado de que esto es solo “la punta del iceberg” ya que la sentencia que condena al Ayuntamiento a indemnizar con más de 330 millones de euros a parte de los propietarios de terrenos en Serra Gelada llevará asociada nuevas subidas de tasas e impuestos.
Charco ha recordado las “fatales consecuencias” que lleva asociada esta sentencia que comprometería el importe total de dos presupuestos y medio del Consistorio, y que equivale a una deuda de más de 4.500 euros por habitante. “El futuro económico del Ayuntamiento pinta muy mal y, lamentablemente, los más perjudicados van a ser los vecinos y vecinas de Benidorm que verán un incremento brutal en sus tributos y una merma importante de los servicios públicos. Y todo por las decisiones de un alcalde que no supo medir las consecuencias de sus actos y que, con su hoja de ruta, ha llevado a la ciudad a la quiebra técnica”, ha remarcado
Por último, el concejal ha censurado que “en lugar de trabajar para solucionar los problemas de los ciudadanos mejorando los servicios públicos, el alcalde solo se preocupa de sus fotos y viajes por la provincia”. “Antes de elecciones todo eran promesas y tras ganar se ha dedicado a incumplir todo lo prometido subiéndonos los impuestos para así tapar su nefasta gestión económica en el Ayuntamiento”, ha recalcado.
El tasazo en cifras
Charco ha criticado que antes por una vivienda se pagaba 112 euros por la basura mientras que ahora el recibo va desde los 189 hasta los 217 euros; un bar de menos de 100 metros cuadrados antes 803 euros frente a los 1380 de este año; un bar de más cien metros antes pagaba 1136 y ahora 1952 euros; un establecimiento comercial ha pagado 522 euros mientras antes pagaba 304, o los 823 euros de los gimnasios frente a los 478 que abonó en 2023. Así, el concejal ha censurado de nuevo este “tasazo” y ha denunciado que el PP “no fue sensible con los que más lo necesitan y no hizo un reparto equitativo a pesar de nuestras propuestas”. “Un año más, esta subida vuelve a golpear el bolsillo de los ciudadanos de a pie y la pequeña empresa, como bares, comercios o peluquerías. El PP, gran precursor de las bajadas de impuestos a nivel nacional y autonómico a las grandes rentas, aplica en Benidorm una subida de impuestos donde el gran perjudicado es el ciudadano”, ha apuntado.